He soltado la atadura del tiempo
he soltado aquel anclaje del alma.
Pero llevo el polvo de un largo viaje
que aun no me puedo sacudir.
Aléjame de las sombras de la noche
y sumergeme en las aguas de tu Olimpo.
Cántame al oído,
Cántame al oído,
junto al regocijo de mi calma,
aquel recuerdo de un sueño inconcluso
aquel recuerdo de un sueño inconcluso
transformado con el tiempo.
Hazme recordar el significado
del sentir en las mañanas el frío.
Hazme recordar el motivo
por el cual debo seguir amando.
Contemple tus ojos entre espuma una noche
deseando así, seguir estando vivo.