miércoles, 29 de octubre de 2014




Soy quien cubrió tu dolor
hasta fin de siglo.
Dos y no tres
antes vos, antes yo... herido.

Sé que volví y sufrí
por aquel desvío.

Vos, yo, fin, dos, tres.
Rol que jugué
sin saber, sin pensar
lo mismo.
Fui rehén del captor
y crecí en cinco minutos.

Hoy salto al vacío,
sé muy bien donde voy.
No pendo de un hilo,
sé muy bien donde estoy.

Fe en saber contemplar
el camino oscuro.
Fe de entender
que me fui y dejé tu mundo.

Hoy salto al vacío...
 Lisandro Aristimuño.