Tal vez sea un lapso corto,
tal vez me extrañes mas que la suerte...
Se me hace impensable transcurrir la vida
hasta viejo,
hasta muerto,
sin vos.
Pero es lo que elegí.
Hoy la ternura parece un milagro,
mi tibieza y dulzura parecen un rezago...
de algo que no fue
de algo que siempre quise dar,
a la persona equivocada.
Ella tal vez, me ayudo a equivocarme,
ella tal vez, me dio confianza a desterrarte
de mi mente tan pura,
como el agua de donde bebe el quetzal.
Y tal vez vos fuiste
(como dijo Baudelaire)
un placer espantoso y una dulzura horrenda.