Viajar
tranquilo.
Tejiendo jacarandas por el camino,
contemplando tu mirada.
Ver la reverberación
en tu voz.
Contemplar a 10 centímetros
la remembranza que provoca tu extraña voz.
Querer abrazarte todo el tiempo
y sentir tus besos al amanecer.
Escuchar dentro mio
como estallan esas partículas de amor,
para contemplarte
quedarme callado
y tomarte la mano para dormir.